La pequeña oquedad que apareció días atrás en la mal llamada Hoya de San Juan, en las estribaciones del barrio histórico de San Francisco hacia el sector de El Cubillo, no presenta interés etnográfico, toda vez que se trata de una cueva acolmatada y reutilizada, con restos de callaos de barrancos y algunos fragmentos de industria de lítica asociada.
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