En el año 1968 L. Diego Cuscoy publicó el libro Los Guanches. En este trabajo el autor dedica un capítulo al menceyato de Taoro en el que realiza una descripción y estudio del mismo atendiendo a las características geográficas y a las evidencias arqueológicas. Así, determina que la demarcación de este menceyato tendría “ (...) como límite natural, por el NE, el Barranco de San Antonio, y por el O el Barranco de La Chaurera, próximo a San Juan de la Rambla. Los accidentes más importantes en su límite costero son La Caleta Negra, Punta del Barranco Hondo, Punta del Ancón, acantilados de Martiánez, Punta del Guindaste y Playa de las Aguas, ya en San Juan de La Rambla. Por el S su límite natural sería una línea que marcharía ceñida al borde inferior de los bosques, entre los 800 y 1000 metros sobre el nivel del mar”.
Para Cuscoy, el Valle de La Orotava constituye, además de una comarca geográfica bien definida, una unidad de población, que viene dada por la regularidad del clima y las favorables condiciones del suelo. Los parajes de El Ancón, Playa del Bollullo, Barranco de la Arena, Malpais de Taoro, etc., definen las características ecológicas de la población que ocupó el valle que no sólo se asienta en los acantilados, desde la Punta de Barranco Hondo, en Santa Ursula, hasta la Punta del Guindaste, en Los Realejos, sino que penetra por los barrancos que cruzan en sentido norte-sur el valle de la Orotava. Así, para Cuscoy, el valle de La Orotava presenta tres puntos importantes en cuanto al número de pobladores guanches: los acantilados, los barrancos y las laderas del Este, los del Oeste y la parte central correspondiente a la costa actual del Puerto de la Cruz.
Para algunos autores, Cuscoy realizó el primer inventario arqueológico de la isla de Tenerife. En efecto, este autor hizo una relación por municipios de los sitios arqueológicos localizados hasta ese momento. Así, citó para el Valle de la Orotava el yacimiento funerario de Roque Blanco, el poblado de cuevas con necrópolis de El Ancón, el paradero pastoril de Montaña Los Pinos, las cuevas sepulcrales de la Playa del Bollullo, el Barranco de la Arena y la Cueva de Bencomo en el municipio de La Orotava. En Los Realejos: Cueva de El Mocán, Cueva del Patronato, el conchero de Zamora, Llanura de Médez, el poblado de habitación con necrópolis de la Gordejuela, La Longuera, la cueva sepulcral de El Guindaste, paradero pastoril de Los Picachos y las cuevas del Tabonal y la Rambla de Castro. En el Puerto de la Cruz las cuevas de habitación con necrópolis de Martiánez y las cuevas sepulcrales de Mª Jiménez y Malpaís. Pertenecientes a San Juan de la Rambla cita las cuevas sepulcrales de El Masapé , Barranco Poncio y Las Aguas, y las cuevas de habitación del Barranco Ruiz[1].
[1] En 1973 se llevó a cabo la ejecución de la Carta Arqueológica de Tenerife, elaborada por de Mº Cruz Jiménez, A. Tejera Gaspar y M. J. Lorenzo Perera. Estos autores citan los mismos yacimientos que Cuscoy pero añaden el yacimiento de Tigaiga. Finca de la fuente, conchero o restos de una cabaña en el municipio de La Orotava. Localizan el Barranco Poncio y el Barranco Ruiz en Los Realejos, en lugar de San Juan de la Rambla como hace Cuscoy.
1 comentario:
Siempre es importante saber algo más sobre el lugra en que se nace, como en mi caso. Me alegra conocer tu blog y aunque hace unos días no te lo dijera, yo también tengo uno hace tiempo jeje. No está a este nivel pero bueno se hace lo que se puede. laincognita.blogs.terra.es Espero que te guste, el tuyo me encanta. Besos, Jesús.
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